La pandemia del coronavirus ha dejado a muchos sin trabajo o bajo un Expediente Regulador Temporal de Empleo, que en muchas ocasiones es como estar sin trabajo debido a los retrasos o los impagos del SEPE.
Los afortunados que la crisis económica que ha provocado este virus no les ha afectado laboralmente viven en ocasiones situaciones que se definirían como explotación laboral, que lamentablemente muchos terminan aceptando ante un posible despido.
Una de estas situaciones donde un Jefe intenta obligar a un trabajador que trabaje durante el fin de semana es la que ha compartido la famosa cuenta de Twitter llamada @JobsMierda , un perfil que es gestionado por la periodista Alejandra de la Fuente de «El Público» y que se dedica a denunciar y difundir la injusticia e irregularidades laborales que suceden así como ofertas de trabajo fraudulentas o que vulneran los derechos de los trabajadores.
Una petición fuera de lugar
Eran las 20:45 de un viernes cuando el empleado se encontraba cuidando de su hija y recibió un mensaje por parte de un cargo intermedio en el que le pedían que a la mañana siguiente estuviese en la oficina a las 8:00 horas.
Como era de esperar este mensaje cogió por sorpresa al trabajador, ya que aparte de que ser una petición que estaba fuera de lugar, tampoco tenía posibilidad de satisfacerlo los intereses del empresario, ya que debía hacerse cargo de su hija durante el fin de semana y así se lo hizo saber a la persona que le contactó.
Obviamente, el trabajador quedó estupefacto al leer el mensaje, ya que, aparte de ser una petición que no deberían hacerle, tampoco tenía posibilidad de satisfacerla, ya que debía hacerse cargo de su hija durante el fin de semana y así se lo hizo saber a la persona que le envió el mensaje.
Me escribes a estas horas sabiendo que mañana no trabajo y tengo a la niña el fin de semana. Así lo había acordado con la madre y avisé de esto
El emisario entendía perfectamente la respuesta dándole la razón, pero que él solo cumplía órdenes de su superior, que le pidió que le avisara. Fue entonces, cuando el empleado viendo que no le quedaba otra alternativa le respondió:
¿Le puedes decir que qué hago con la niña? La madre y yo hablamos que me la quedaba este fin de semana
Este le respondió que buscara una solución, como hablar con la madre y que se la quede ella. La conversación siguió hasta que finalmente le dejo un ultimátum:
No lo sé, pero mañana tienes que estar aquí. Lo siento
