Rocío Flores ha cambiado radicalmente desde que diera el salto a la pequeña pantalla con su participación en “Supervivientes”.
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Hace unos días, Rocío acompañaba a su novio Manuel a un tatuador, y ella misma acabó sucumbiendo a un nuevo tatuaje.
Recuerdo de su familia materna
Rocío Flores ha querido inmortalizar en su piel dos recuerdos de su familia materna, que, en cierto modo, la acercarían un poco más a su madre, Rocío Carrasco.
Sí, he pecado
Así confesaba, de manera divertida a sus seguidores, que no había podido resistir la tentación de hacerse un tatuaje.
Los tatuajes en cuestión son las firmas de sus abuelos, de puño y letra, originales. La firma de Rocío Jurado y de Pedro Carrasco, y el guane con el que ganó el campeonato del mundo.
Rocío Flores tenía pasión con sus abuelos, además de una gran relación. Incluso en alguna ocasión ha confesado no poder escuchar canciones de su abuela porque le despertaban muchos sentimientos.
Sin posibilidades de reconciliarse con su madre
A pesar de todos los intentos que ha ido realizando Rocío Flores por intentar un acercamiento con su madre, Rocío Carrasco, cada día que pasa está más lejano.
Nunca se sabe que le deparará el futuro, pero sí es cierto que, hoy por hoy, la reconciliación no es una opción.
